Desde hace días queria publicar esta entrada con origen de una bonita experiencia de hace un par de semanas...
nos encontrabamos con la necesidad de encontrar un material de dificil acceso XD lana de un color super raro, y fuimos al unico lugar donde se puede encontrar de TODO, a precios risibles, ese mágico lugar es el mercado central
la verdad esta visita, aunque estoy acostumbrado a ir desde pequeño, fue de algún modo diferente, porque con la persona que me acompañaba podía compartir y al mismo tiempo descubrir una faceta inesperada de esa vida que tantas veces vi con lamento y desdén. Para mi sorpresa, el mercado es un lugar de riqueza cultural incomprable
A parte del hecho de que se puede encontrar prácticamente cualquier cosa sabiendo buscar, una de las cosas que en definitiva son mas enriquecedoras es una visita al edificio de los comedores.
Fuimos a almorzar al puesto de mi tia, y descubrí que cocina identico a mi abuela que murio hace más de 12 años. Inmediatamente volvieron en tropel a mi memoria recuerdos de infancia, donde la comida sin ser particularmente especial o sobresaliente, tenia algo que no cabe en una descripción que la hacia mas deliciosa que cualquier otra comida del mundo. Era como haber ido hace 30 años de visita a la casa de mis abuelos cuando mis papas erán niños.
Así cada puesto es una familia distinta, una historia y un legado que ha pasado de generación en generacion y que encierra mucho más que un simple tiempo de comida. Y lo mas triste de todo que nuestro estilo de vida moderno llevara a ese último bastión de esa época a un final triste y en el olvido.
Me siento muy afortunado de haber podido descubrir eso, de no estar prejuiciado por el elitismo de clases sociales y desearía que mis hijos pudieran llegar a ver eso... un pequeño remanente de lo que se refieren cuando dicen "Los buenos tiempos"
